y sin embargo todas las noches significaba arrancarme una parte de mí para plasmarlo en una hoja, o en un lienzo, o en una pauta y al viento de un instrumento. todas las noches una pena en mi libreta, todas las noches el recuerdo de la dama. todas las noches la luna me veía llorar, y las estrellas escribían mis poemas en el cielo. el viento murmuraba mis sonatas, el viento escuchaba mis lamentos.
era el sentimiento, aquel preciado sentimiento, el que me hacía sonreír en mis lamentos, el que me hace añorar mis despechos. y hoy la dama se aparece por mi ventana, es el reflejo de un lienzo, el reflejo de un sentimiento. y la luna llena engaña mis pensares, desprende mi razón y la dibuja sobre la ventana, es la dama, reflejo de una estrella.
y la luna se esconde en el horizonte, y las estrellas se despiden de la noche, pues es de madrugada, y el sol se ha negado a compartir el cielo. pero el reflejo de la dama permanece sobre mi ventana, no es el lienzo, ni tampoco es la dama, es la sombra de mi pensamiento.
CW